La Federación Madrileña de Deportes de Invierno (FMDI) y el Ayuntamiento de Cercedilla han rendido un emotivo homenaje a distintas personalidades del mundo de la nieve, en reconocimiento a su gran labor de promoción del esquí madrileño.
Al acto, presidido por Antonio Fernández- Coppel, Pte. de la FMDI y el alcalde de Cercedilla, Luis Miguel Peña, han asistido numerosas personalidades relacionadas con el mundo del esquí. Tras una ofrenda floral a la estatua de nuestro campeón olímpico «Paquito» Fernández Ochoa, se ha celebrado el homenaje en un abarrotado Museo del Esquí.
Ofrenda floral de los homenajeados y autoridades, a la memoria de «Paquito».
El primero de los homenajeados ha sido el noruego Birger Sörensen, uno de los pioneros del esquí en Madrid y en España, cuya nacionalidad dio nombre a la famosa Loma del Noruego, una de las magníficas crestas de la Sierra del Guadarrama.
Su nieta Cristine, ha recogido la placa de reconocimiento y ha recordado como su abuelo llegó a Madrid en el año 1900 para encargarse de la sucursal de la empresa maderera familiar . «En sus continuos viajes al aserradero del Paular descubrió en la Sierra de Guadarrama el lugar perfecto para dar rienda suelta a su afición por el esquí.»
Cristine Sörensen, nieta de uno de los pioneros del esquí en España.
La historia de la estación de Valdesquí comenzó hace más de cuatro décadas, el 6 de enero de 1972. José González de la Fuente supo ver una estación de esquí en lo que por entonces eran unos terrenos inhóspitos. 44 años después, Valdesquí es estación de referencia del Sistema Central, dónde cada año se dan cita miles de esquiadores. José González ha sido otro de los homenajeados, aunque por problemas de salud ha recogido el premio su hija María.
María González, hija del fundador de Valdesquí, junto al alcalde de Cercedilla y el Pte. de la FMDI.
Aurelio García Gordoncillo, tercer galardonado, fue fundador del Albergue Juvenil del Puerto de Navacerrada y patriarca de una saga dedicada al mundo del esquí. Entre sus siete hijos cabe destacar a Aurelio García Oliver con un gran palmarés en campeonatos de esquí nacionales e internacionales y compañero inseparable de «Paquito» en los circuitos de competición (fue duodécimo en Sapporo 72).
Aurelio García Oliver y sus hermanas Mariuca, Pilar y Nieves han recogido la placa conmemorativa en memoria de su padre.
La familia García Oliver recoge la placa en reconocimiento a su padre Aurelio, de la mano de Eduardo Roldán, ex- Pte de la Federación Española de Deportes de Invierno.
Manuel Ochoa Nieto continuó con el negocio de restauración que su padre Juan Manuel estableció en el Puerto de Navacerrada allá por 1940 y que a día de hoy regenta la tercera generación con su hijo«Manolo»al frente. Tras casi ocho décadas dando de comer a esquiadores y turistas, el restaurante «Casa Ochoa» sigue siendo referente del buen paladar en el Puerto. Manuel Ochoa Nieto, campeón de España de esquí, fue también el artífice de que su sobrino «Paquito»aprendiera de niño a descender por las pistas de esquí. Por todo ello la FMDI ha querido reconocerle.
Su hijo «Manolo» y sus nietas María y Sara han recogido la placa que homenajea a todo un símbolo del mundo de la nieve en Cercedilla.
Manolo Occhoa junto a sus hijas Sara y María, el alcalde de Cercedilla, Luis Miguel Peña, el concejal de Deportes, Raúl Martín y el Pte. de la FMDI, Antonio Fernández – Coppel.
Y el último de los reconocimientos ha sido para el club de esquí madrileño TECALP, que acaba de cumplir diez años preparando deportistas para la competición, desde la infancia. El galardón lo ha recogido el entrenador, Juan José de la Torre.
Juan José de la Torre y su hijo, junto al alcalde de Cercedilla, el concejal de Deportes y el Pte. de la FMDI.
Durante el acto también se ha hecho entrega de un ramo de flores a dos grandes mujeres deportistas olímpicas: Sara Castillejo (esgrima) y Sonia Lafuente (patinaje).